Valentina Amaya
Directo Bogotá, en su sección Directo Mundo, hizo un recorrido por Mumbai y Udaipur, dos ciudades turísticas de la India. Conoce su cultura, lugares turísticos, su gente y sigue la sección para conocer más lugares de todos los continentes.
Los viajes son uno de los mayores sueños y placeres que un ser humano puede experimentar, por esta razón, diariamente millones de personas empacan sus maletas y se dirigen a destinos desconocidos para explorar.
La India es uno de los destinos más visitados, especialmente por europeos, quienes representan el 60% de extranjeros dentro del mismo. Ir allí es una experiencia inenarrable. Más de 1300 millones de personas habitan este país de contrastes . Es el segundo más poblado después de China.“Es la tierra de la diversidad, de los colores, sabores y olores”, afirma Shakti Behera, conductor de bus en Mumbai.
Su territorio se extiende desde los Himalayas, por el norte, hasta el sur, en la península tropical. Es una república federal compuesta por 29 estados, cada uno con un dialecto único.
“Para conocer la india es necesario sentirse indio“, explica Yamir Nahru, zapatero de Udaipur, “para los turistas nunca va a ser fácil venir a mi país, chocan directamente con la cultura, muy distinta de la que ellos provienen. Si vienen a hospedarse en hoteles de lujo (como todos esos que veo desde mi casa, o en las películas por que no puedo entrar allí) no van a entender a fondo el por qué de nuestras formas de vivir y comportarnos en pleno siglo XXI. La comodidad y el confort de esos lugares cierra las posibilidades de adentrarse en lo menos pensado de mi país, los lugares clandestinos y rincones que muestran lo que es vivir aquí y hacer parte de este mundo, mi mundo“.
Estilo de Vida
70% de la población hindú lleva un estilo de vida alejado de las tradiciones occidentales. En ciudades como Mumbai y Udaipur resulta común ver en las calles las personas andando descalzas, allí es normal que duerman donde les cae la noche, y los baños, muy diferentes a los que conocemos, constan solamente de letrinas donde el papel higiénico no existe.
Por otro lado, sobresale un sistema de limpieza que choca con las costumbres occidentales: las lavanderías. “La ropa la limpiamos a mano, no usamos máquinas sino simplemente jabón, agua y un palo para escurrir la ropa, y después la dejamos secar al aire libre. El aire, como uno de los cuatro elementos poderosos del mundo, la seca de manera natural evitando contacto con elementos materiales”, explica Shaila Handoo, de 18 años, lavandera en Mumbai.
“Aquí mismo donde yo trabajo es la lavandería mas grande del mundo. Funcionamos 24 horas al día, nos dividimos entre todos por turnos para que cada uno tenga las mismas oportunidades de hacer dinero, ya que por pertenecer a la casta baja, es decir somos de estrato social bajo, de la casta de servicio, necesitamos ingresos para sobrevivir, por prenda cobramos entre 15 y 20 rupias“.
La rupia como moneda oficial de la India representa 500 pesos colombianos, es decir una rupia son 30 pesos colombianos. Las 15 o 20 rupias son 450 pesos colombianos por prenda que se lave.
Estrato social y Matrimonios
Anjali Kumar, una mujer que ha sido limpiadora de baños por más de 20 años en Mumbai, narra cómo funcionan los sistemas sociales y las relaciones (matrimonio):
“Usted como turista en pleno siglo XXI se preguntará cómo es que el sistema jerárquico de las castas prevalece aún con fuerza en mi país. La mayoría contrae matrimonio arreglado por nuestra misma familia. Mis padres decidieron, desde que yo nací, quien iba a ser mi esposo debido a un acuerdo que hicieron con los padres de él. No existe el amor a primera vista, sino el amor por contrato. De acuerdo al estrato social escogen la pareja ideal, de acuerdo con la preparación académica, el color de la piel, la casta… Cuando tenemos problemas o enfrentamientos de pareja no se recurre al divorcio, sino a la charla, que se promueve dentro de la familia para solucionar nuestras diferencias“.
El sistema de castas de la India se refiere a una forma de estratificación social establecida, la cual clasifica a las personas en cuatro grandes castas que son: Brahmanes, dentro de la cual se encuentran los sacerdotes y los intelectuales; Kshátriyas, de la cual hacen parte los guerreros y los reyes; Vaishyias, los comerciantes; Shudras, campesinos y trabajadores; Y por último, los Intocables o parias, en donde está la servidumbre y los trabajos callejeros (de acuerdo con las creencias hindúes tradicionales, esta última se considera fuera de las cuatro castas).
Kokradi Vala Rai, una guía turístico de 35 años de edad, parte de la “casta” de los intocables, proviene de una familia de casta baja, su abuelo paterno fue carpintero y el materno zapatero, sus tíos y hermanos son recogedores de basura. Vala Rai tiene la posibilidad, según lo dice la actual constitución, de casarse con cualquier mujer sin prohibiciones, sin embargo por fidelidad a la tradición y a sus costumbres no lo hace: “Yo creo en el amor y respeto los matrimonios que se hacen por dicha razón, todos tienen derecho a ser felices, pero la felicidad y el amor para mí se centran en mi tradición, como indio de casta baja. Por esta razón mi pareja ideal debe hacer parte de ella también” , afirma Vala Rai.
Creencias
El 80.5% de la población de India practica el hinduismo, esto quiere decir que 827,578,868 indios acoplan su vida y sus creencias a esta religión.
Sai Baba, guía espiritual, indio de la ciudad de Udaipur, explica que “la reencarnación es el resultado del karma, la ley por la cual las consecuencias de las acciones dentro de una vida se tienen en cuenta para la siguiente. La amabilidad, la verdad, la ayuda a los demás y el amor a la humanidad tienen una gran importancia para sentirse felices consigo mismos y con su entorno“.
Otra creencia, muy alejada de las costumbres occidentales, tiene que ver con la manera de alimentarse. Muchos Indios no soportan el hecho de ver a otros comiendo carne de res, ya que consideran a la vaca como un animal sagrado, entonces, no es raro ver en las calles grupos de vacas que pasan el tiempo sentadas al lado de las tiendas o simplemente comiendo pasto al lado de un restaurante.
No se come carne roja porque es pecado, especialmente en el norte de la India, en el sur, en ciudades como Nepal sí se consume normalmente. “Es común ver vacas en las calles porque son consideradas parte de la familia, por eso cuando mueren deben hacerlo fuera de la casa para que su amo no se sienta culpable por ello”, explica Chaitra Patil, lavandera en Mumbai.
Los animales y la naturaleza son sagrados en la India, las personas los alimentan para sanar sus pecados de vidas anteriores.
Casi todas las creencias tienen un trasfondo mitológico. Hay una leyenda detrás de cada una de las tradiciones. El elefante, el caballo y la vaca son animales sagrados y representativos de buena suerte, fuerza y supervivencia respectivamente.
Los rituales religiosos por otro lado, según afirma Adri Govinda, camarero del hotel Lake Palace de Udaipur, “son nuestro mayor placer, cuando entras a un templo estás en un lugar sagrado, por esta razón y como muestra de respeto, entramos con los pies descalzos y dejamos afuera los aparatos tecnológicos que interfieren con nuestras oraciones y nuestro espacio personal del día“.
El sari o saree es una trabajada tela que suele tener una longitud de entre 4 y 9 metros de largo y 1 metro de ancho. La belleza de esta prenda de vestir reside en el trabajo realizado sobre él a base de bordados y enriquecido con otras telas e incluso hilos de plata y oro. “Hay muchas formas de usarlo y no solo es para cubrir el cuerpo sino que es símbolo de estrato social y posición económica“, explica Denali Uma Bel, jóven mujer habitante de Mumbai.
“Nos cubrimos de pies a cabeza simplemente por protección, no es un tradición rara o retrógrada, sino que lo hacemos para cubrirnos del sol que pega muy fuerte, más que todo el en verano. Sin embargo los colores sí tienen que ver con ciertas creencias, por ejemplo el rojo lo usamos las novias que estamos guardando respeto para nuestro marido hasta el matrimonio, así como el cubrir por completo la cara con un velo para que en la calle sepan que somos casadas, que ya somos de alguien más”.
Mumbai , a pesar de no ser la capital del país es una de las ciudades más pobladas del mundo, con 22 millones de habitantes. Se encuentra en la costa oeste del subcontinente indio y tiene un puerto natural de gran profundidad. En 2009 fue catalogada como ciudad global. También es la ciudad más rica de la India, con el mayor PIB de todas las ciudades en el sur, oeste y centro de Asia. “Es la capital financiera y siempre ha sido famosa por que fue fundada por los europeos, así que tiene de todo para hacer y para conocer. Es como el Nueva York del este, un encuentro de culturas y razas que permite que sea diversa y muy concurrida por extranjeros y turistas“, explica Shakti Behera.
Udaipur se encuentra al sur de la provincia de Rajastán y es conocida como la ciudad de los 100 lagos, la Venecia de Oriente o el lugar más “romántico del subcontinente”, según el británico James Tod. Fue fundada a orillas del lago Pichola por el maharajá Udai Singh II del que toma su nombre. “Es a lo que llaman Venecia del este o ciudad del lago, la gente que no puede viajar a Europa prefiere ir a Udaipur. Es una ciudad de palacios, de lujo, en la zona turística que recuerda las películas de realeza y todo aquello que parece irreal” afirma Yamir Nahru zapatero de la ciudad de Udaipur.
El viaje a la India es un choque cultural, la historia y la cultura que se encuentran detrás de ella dan importancia a la felicidad no por las cosas banales o materiales sino por la búsqueda del yo interior, la caridad con los demás, el respeto, la igualdad y la veneración a lo naturaleza y a la vida. La experiencia vale la pena para todo aquél que desee alejarse del mundo consumista y adentrarse a comprender lo valioso de un país como India.