Por: Daniella Leal
400 perros se deben sacrificar semanalmente en promedio para controlar la natalidad de estos. La cuota es de 60 perros en cada redada de “recolección”.
Perros callejeros o perros que sus dueños sacan sin correa incumpliendo las normas de la policía son los que se recogen en cada operativo. El centro tiene 256 jaulas para los perros que se traen de las calles.
Eutanasia individual es la forma de sacrificio que actualmente se desarrolla en el centro de Tenencia y adopción de Bogotá o mejor llamado Zoonosis. “A cada perro se le suministran horas antes del sacrificio una inyección de Tranquilán que los duerme y les permite no sentir nada. Eutanex se llama la sustancia que se les inyecta para matarlos” dice Camilo Molina* trabajador del Centro de Zoonosis.
Según estimaciones hechas por el Distrito en varios estudios cada eutanasia le cuesta al Estado alrededor de 150mil pesos.
“20.000 pesos es la suma por la que se puede adoptar una mascota en el Centro de Tenencia y Adopción Canina en Bogotá de lunes a viernes de 2 a 5 de la tarde y los fines de semana de 8am a 1pm. Los animales se entregan desparasitados, con su esquema completo de vacunación y esterilizados” afirma Juanita Morales voluntaria de las jornadas de adopción y vacunación. El objetivo de este proceso es la reubicación de perros callejeros.
Entre los programas que tiene la Secretaría Distrital de Salud para el control de la población canina está la recolección canina callejera y esterilización gratuita a hembras caninas y felinas ubicadas en estratos 1,2 y 3. Se cuenta además con las jornadas de adopción organizadas por Zoonosis con el fin de motivar hábitos adecuados en la tenencia de mascotas.
40.000 perros callejeros habitan las calles de Bogotá y se recoge el 10% cada semana aproximadamente para sacrificio. “Con la propagación de adopciones a animales de la calle los sacrificios disminuyen y les podemos dar una mejor vida a esos perros y gatos. No se merecen morir de forma tan grotesca y desgraciada” dice Mariana Dávila activista contra el maltrato animal.
*Camilo Molina es un nombre falso para proteger la identidad del personaje como él mismo lo pidió.