Los estudiantes universitarios salieron nuevamente a las calles ¿Cuáles son las causas de la protesta?

Por Juliana Gómez Herrera

Estudiantes de universidades públicas y privadas, desde sus varias organizaciones, se movilizaron el pasado 31 de octubre en diferentes partes del país, principalmente, por la exigencia de la reforma a la ley 30 de educación superior.

Luego de que el movimiento estudiantil hubiese llevado a cabo una movilización el pasado 10 de octubre por motivos similares, el día martes 31 de octubre en horas de la tarde, los estudiantes de diferentes Instituciones de Educación Superior (IES) se reunieron en las calles para reconocer la importancia de la reforma a la ley de educación superior, pero además por su rechazo al presidente del ICETEX, por la paz, por la exigencia de políticas de género que apunten a transformar la educación desde el bienestar universitario, y por su preocupación con quienes fueron electos el pasado 29 de octubre para los cargos de alcaldes, gobernadores, diputados, concejales y ediles.

En Bogotá, a pesar de la lluvia, los estudiantes de las universidades privadas iniciaron un plantón frente a la Javeriana desde las 3:30 pm, al que luego se unieron estudiantes de la Universidad Distrital que venían desde Ciudad Bolívar. La movilización avanzó hacia el norte y desde la calle 45 se desplazaron hasta la Universidad Nacional, pasando por la Caracas y la NQS, en donde culminó la marcha. Por otro lado, quienes se reunieron desde la misma hora en la Universidad Pedagógica, calle 72, se trasladaron a las 5 pm hasta la embajada de Palestina, que fue el último punto de encuentro.

“Nos movilizamos puntualmente bajo cuatro ejes, el primero como mecanismo de presión de la necesidad de realizar la reforma a la ley 30, que otorga el estatuto de Derecho a la educación, y para visibilizar quienes desde el congreso han querido y quieren impedir este avance en términos legislativos. El segundo, por la necesidad de una política de género en las IES que contribuya en la despatriarcalización del recinto, el tercero y cuarto, son la renuncia del Presidente del ICETEX, Mauricio Toro, el cual de forma tiránica avanza en una reforma de fortalecimiento a esta institución, así como apoyo a la búsqueda de Paz entre el gobierno y las insurgencias, aunado a la solidaridad total con Palestina” Andrés Bueno, estudiante de Derecho de la Universidad Libre, miembro de la Asociación Colombiana de Estudiantes Universitarios (ACEU).

Las dos movilizaciones que ocurrieron durante el mes de octubre fueron convocadas desde el Encuentro Nacional de Estudiantes de Educación Superior (ENEES), que se llevó a cabo en la Universidad de Antioquia, en Medellín, del 22 al 24 de septiembre. Un espacio de debate y concertación que reunió a más de 4.000 estudiantes de todo el país con el objetivo de estudiar diferentes reformas en materia de educación y rearticular el movimiento estudiantil, en donde se concluyó fundamental la participación del estudiantado de universidades, tanto públicas como privadas, en el actual momento coyuntural legislativo y político.

Los estudiantes también han participado de otros espacios de discusión y debate como la audiencia pública que se ejecutó el pasado jueves 5 de octubre, en el congreso de la república, sobre el proyecto de ley 224 de 2023 Cámara de representantes, en donde también tuvieron la oportunidad de intervenir organizaciones como FECODE (Federación Colombiana de Educadores), ASCUN (Asociación Colombiana de Universidades) y otras asociaciones estudiantiles que llegaron desde varias regiones de Colombia a la primera comisión de la cámara para hacer su intervención. Espacio dentro del cual, participó también la ministra de educación Aurora Vergara Figueroa.

“La lucha estudiantil supera sus errores infantiles de negar espacios un poco más institucionales, comprendemos la necesidad de luchar en todo lugar, la combinación acertada de las formas de lucha donde se posibilite la garantía de participación vinculante a la discusión, desde la asamblea, la marcha, la audiencia pública, el congreso, todo espacio es una posición que tomamos en nuestro avance por la transformación del modelo de educación” Andrés Bueno, miembro de la ACEU en representación de las universidades privadas.

En Cali, las manifestaciones se citaron a las 5 de la tarde en la Universidad del Valle, sede Meléndez, para movilizarse hasta el parque de las banderas, en donde la exigencia principal fue la defensa de la educación como derecho fundamental y el rechazo a la actual administración de la institución educativa, en cabeza del reciente elegido rector Guillermo Murillo Vargas.

La lucha del movimiento universitario es también una lucha política.

En Barranquilla el punto de encuentro fue la carrera octava con Murillo también a las 5 de la tarde, y se culminó la movilización en la plaza de la paz, aunque desde las 8 de la mañana se reunieron en una jornada que integró diferentes muestras artísticas y una olla comunitaria.

Sobre las causas y exigencias de las movilizaciones de los estudiantes y su participación en los diferentes espacios que se han convocado por el movimiento y el mismo gobierno en el transcurso del año, el congresista y coordinador ponente de la reforma a la ley de educación superior, Gabriel Becerra dijo:

“La lucha del movimiento universitario es también una lucha política. Si se quiere construir una nueva orientación que coloque énfasis en el tema de la educación pública de carácter gratuito, con defensa de los criterios democráticos, del carácter científico de la educación y del respeto a la organización estudiantil, deberíamos hacer equipo conjunto; el movimiento estudiantil, en su autonomía y con sus reivindicaciones, con la bancada y con los liderazgos progresistas del congreso de la república, para poder avanzar en los objetivos comunes. Desde esa perspectiva nosotros estamos trabajando por mantener un diálogo fluido y constructivo”

Becerra también se refirió sobre el punto legislativo que se vive en este momento en Colombia, y que afecta y convoca a los estudiantes a nivel nacional:

“Lo que estamos viviendo, por primera vez después de muchas décadas, es la posibilidad de una agenda legislativa marcada por una reforma universitaria que tiene componentes legislativos como la ley estatutaria, como la posible reforma a la ley 30, la reforma al ICETEX, entre otras. Pero también tiene unas medidas de carácter ejecutivo, que dependen fundamentalmente de la voluntad del gobierno a través de lo definido en el plan nacional de desarrollo, como el aumento de cobertura y otros aspectos que están allí contenidos. Lo que hay es un momento de oportunidad en el congreso de la república, con la iniciativa del gobierno nacional, para reformar la educación, y de esta manera retomar pilares que se habían perdido en los últimos 30 años de sistema, marcado fundamentalmente por la mercantilización” Gabriel Becerra, congresista de la Cámara de representantes.